Aquí podemos ver la unión de lo viejo con lo nuevo, como tejido principal y protagonista el tweed, con mezclas arriesgadas como los brillos y acabados futuristas, en algunos modelos se imponen los adornos orientales como inspiración, como fajines, los estilos hippies y bohemios se hacen su sitio en una pasarela de tanto renombre como la de
Chanel de alta costura, los colores en tonos tierra y verdes, blanco negros, grises y brillantes como el plomo y el plata que brillan con luz propia en cada aparición.